Praga, 31 ago (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores checo, Tomas Petricek, convocará esta semana al embajador chino en Praga, después de que Pekín dijera que el país centroeuropeo pagará ‘un alto precio’ por la visita a Taiwán de una delegación checa liderada por el presidente del Senado, Miloš Vystrcil.
Al anunciar este lunes su intención de pedir explicaciones al representante del Gobierno chino, Petricek consideró que la reacción de Pekín ‘se pasó del límite’.
Aludió así, en declaraciones a la cadena CT24, a la advertencia formulada el domingo por su homólogo chino, Wang Yi, de que la República Checa pagará ‘un alto precio’ por ‘desafiar el principio de ‘una sola China» con la visita a Taiwán de una delegación checa encabezada por Vystrcil.
Para Pekin, la visita de la delegación checa ‘y de las fuerzas anti-China que hay detrás’ supone ‘un acto de traición internacional’, expresó el ministro chino.
Petricek calificó esas declaraciones de ‘abruptas e inusuales en la diplomacia’, e indicó que su país está dispuesto a ‘protestarlas’.
‘Espero que la contraparte china explique esas palabras, que se pasaron del límite’, manifestó, a la vez que recordó que el Gobierno checo respeta la política de ‘una sola China’ y que el viaje a Taiwán del senador ‘no cambia nada las cosas’.
Vystrcil, de la formación liberal-conservadora Partido Democrática Ciudadano (ODS), que se encuentra dentro de la oposición en la Cámara baja, trasladó a los medios checos en Taiwán que la declaración de Pekín supone ‘una injerencia en asuntos internos de la República Checa’.
‘Somos una país libre que tiene interés en buenas relaciones con todos, y confío en que así seguirá a pesar de la declaración (china)’, explicó Vystrcil, que puso el acento en el carácter económico de la visita, en la que participan 89 personas, entre ellas el alcalde de Praga, el político Zdenek Hrib, del partido Pirata.
Pekín y Praga rompieron en octubre pasado su convenio de hermanamiento después de que los ediles checos, a instancia de Hrib, acordaran un convenio similar ‘de carácter apolítico’ con Taipei, la capital de Taiwán, ante lo que el Gobierno chino advirtió de posible perjuicios, al igual que ha hecho ahora. EFE
