El MiG-21 (‘Fishbed’, en la terminología de la OTAN) intervino activamente en la guerra en Vietnam como el rival más temible de los F-4 estadounidenses.

Barato, rápido, fácil de manejar y con bajos requerimientos de mantenimiento. Es relativamente fácil aprender a pilotarlo.
Las fuerzas aéreas de varios países continuaron comprando el MiG-21 por un largo tiempo.