En noviembre de 2019, Steven Gallant ayudó a controlar a agresor hasta la llegada de la Policía, que lo abatió a tiros.
La reina Isabel II del Reino Unido ha concedido el perdón real a Steven Gallant, un asesino convicto que en noviembre de 2019 ayudó a frustrar un ataque terrorista en el Puente de Londres armado con un colmillo de narval.
Gallant se encontraba ese día fuera de la cárcel para participar en un evento de rehabilitación de prisioneros, cuando Usman Khan, un excondenado por terrorismo, mató con un cuchillo a dos personas e hirió a algunas más. Usando una silla y un colmillo de narval que le entregó en aquel momento el funcionario Darryn Frost, el prisionero ayudó a controlar al atacante, que estaba armado con cuchillos y vestía un chaleco suicida falso, impidiendo que matara a nadie más hasta la llegada de la Policía, que lo abatió a tiros.
El Ministerio británico de Justicia reveló el sábado que la reina ha empleado la poco utilizada ‘Prerrogativa Real de la Misericordia’ para llevar el caso de Gallant ante la comisión de libertad condicional el próximo mes de junio, diez meses antes de lo previsto. La decisión final recaerá en la comisión, pero es muy poco probable que a Gallant se le niegue su libertad, indican medios locales.
Un preso ejemplar
En 2005, Gallant fue condenado de por vida con un período mínimo de 17 años por el asesinato de Barrie Jackson, un bombero de 33 años. Gallant y otro hombre esperaron a Jackson frente a un pub y lo asesinaron a golpes, convencidos de que había atacado a la novia del primero.
Sin embargo, desde que entró en prisión, Gallant ha destacado por ser un preso ejemplar que ha expresado remordimiento por su crimen, . Además, ha coescrito varias obras de teatro y ahora está en su tercer año de estudios empresariales.