

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El pasado lunes 26 de agosto se conmemoró en todo el mundo el Dia internacional del Actor (que nosotros preferimos llamar Día Internacional de la Actuación.
El productor y director de cine Juan Basanta, al recordarlo en una nota a uno de los grupos de wasap que congregan gente de teatro y cine, fue el primero en recordarlo.
Desde ese día y los subsiguientes muchos talentos de la actuación comentaron la fecha en redes sociales. Hasta donde vimos en los medios, desde nos encontramos (Canadá), no se hicieron grandes actos públicos (privados u oficiales) con este motivo, y el tema no trascendió más allá del accesible, antihistórico y curioso mundillo de las redes sociales: gente del teatro que se felicitaba a sí misma y con toda la razón. Solo eso.

El origen
Numerosas fuentes consultadas coinciden en que los orígenes de esta conmemoración se remontan al siglo III de nuestra era y se refieren a un actor llamado Ginés de Roma, en la Italia de aquellos tiempos imperiales.
De Roma, cuentan las leyendas, era muy popular en la época. Una vez fue invitado para representar una comedia frente al emperador Diocleciano y le ocurrió parodiar el sacramento del bautismo. Cuando recibió el agua, se convertió al cristianismo, lo que muchos consideran un milagro pues, se dice que mientras ejercía su profesión, encontró a Dios.
Lamentablemente, tiempo después encontró el martirio y la muerte por defender el cristianismo. Ginés de Roma fue decapitado el año 286. Se le considera el Santo de los actores.
El Vestidor
En República Dominicana, con excepción del montaje (coincidente con la fecha) de El Vestidor, pieza original del guionista y dramaturgo sudafricano Ronald Harwood con su elenco: (Sir), Giovanny Cruz, Norman (El Vestidor), Exmin Carvajal, (La señora), Yanela Hernández, (Madge), Luvil González, (Irene) Karoline Becker y (Geffry), Mario Lebrón, quien además es el director. Fue de hecho, el mejor homenaje publico dominicano a esta conmemoración.
¿Por qué este inventario?
Hemos querido rendir justo homenaje a los actores y actrices de antes y de ahora, a los que viven y siguen entregando sus talentos.
También, a los que, luego de producir emociones del más diverso tipo desde el teatro, el cine y la televisión, reposan con la conciencia tranquila de que desarrollaron su pasión, la que les condujo a provocar emociones, a reproducir con autenticidad y maestría, las sensaciones de la vida misma por medio del arte que es el que mejor puede expresarlas: el teatro.
El país tiene pendiente el gran homenaje a sus hombres y mujeres del teatro, comenzando con Romance Campesino, el primer programa en vivo que emitió la televisión dominicana en 1952, hasta el día de hoy.