SANTO DOMINGO. – El director del Instituto Agrario Dominicano (IAD) Leonardo Faña, está siendo acusado de agresión sexual por parte de la gerente financiera de esa institución, tras un hecho ocurrido a principios de este mes.
La acusación contra Faña está contenida en una orden de protección provisional para María Isabel Flores Encarnación. La Unidad de Atención a Víctimas de Violencia del Distrito Nacional se encuentra apoderada de la denuncia.
La denuncia, a la que tuvo acceso El Nuevo Diario, indica que el pasado cuatro de enero el titular del IAD, presuntamente, citó a Flores a un encuentro privado para hablar sobre temas laborales, la cual estaba pautada para las cinco de la tarde, luego a las dos y finalmente a las nueve de la mañana.
El documento indica que Faña y la denunciante acordaron reunirse en un supermercado de esta capital, a los fines de recoger a Flores “para de ahí supuestamente llevarla a la oficina donde coordinaría el trabajo en favor de la institución IAD”. Sin embargo, tras partir del referido establecimiento “fue a parar a la cabaña VIP ubicado en la avenida Luperón e Independencia. Cuando la víctima ve esa acción le dice que se bajaría del vehículo si persistía en la hacer la reunión ahí”.
La denuncia señala también que Faña, supuestamente “le dio una comida y le dio a beber una especie de vino, que el agresor tenía en su vehículo, que luego de ser ingerido por la víctima provocó que esta pierda el conocimiento y las fuerzas, recuperándolo el conocimiento de nuevo en el trayecto de la avenida Juan Pablo Duarte, cuando ya regresaban de Bonao, Santo Domingo”.
Agrega que “cuando vuelve en sí, el imputado Leonardo Antonio Faña Batista está besándola, manoseándola y de nuevo pierde la fuerza y el conocimiento, volviendo en si otra vez, en Jumbo Luperón, en el parqueo de Las Praderas, Distrito Nacional, ahí el imputado le había dado lengua, por diferentes partes, tocándole los senos y otros lugares íntimos internos, besándola, manoseándola de nuevo por todas partes, la víctima salió corriendo despavorida”.
La orden de protección a favor de la denunciante obliga a Faña a “abstenerse de molestar, intimidar o amenazar por cualquier medio, verbal o escrito, directo o indirecto, así como por vía telefónica a María Isabel Flores Encarnación”.